Los Diseñadores de Interiores se
enfrentan constantemente a la necesidad de comunicar
ideas específicas a través de elementos fundamentalmente gráficos. Hay al menos dos razones por
las cuales los diseñadores comunican y critican sus propuestas a través de presentaciones
gráficas, ellas son:
· Primero,
los diseños no pueden ser desarrollados
y verificados en escala real por obvios problemas económicos y prácticos.
· Segundo,
la mente humana tiene limitaciones para generar, mantener, y transmitir sus
diseños si no cuenta con ayuda externa, tales como dibujos y maquetas.
En
la presentación de un proyecto al cliente, se despliegan todas las
posibilidades gráficas, comunicativas y expresivas, por medio de volúmenes,
sombras, luces, texturas, colores y ambientación.
Tradicionalmente,
los diseñadores realizaban sus dibujos a
mano alzada. El dibujo a mano alzada es aquel que se crea sin
emplear ninguna herramienta auxiliar, sino que se hace con la mano y el lápiz u
otro instrumento similar. También se lo conoce como dibujo a pulso. Este tipo de dibujo no se hace a escala, pero
mantiene las proporciones, y para obtenerlas se emplean trucos simples como
tomar medidas con el brazo extendido, ayudándonos con el lápiz, y luego esas
medidas son trasladadas a la hoja.
Pero en la actualidad, es
evidente que existe una evolución en los
métodos de representación en el Diseño de Interiores gracias a los avances
en la tecnología, y el profesional debe incorporar conocimientos y herramientas
digitales para aumentar su
productividad, acortar tiempos y mejorar la comunicación tanto con su
cliente, como con sus contratistas.
La era digital ocupa un lugar importante en la profesión y se transformó
en una herramienta imprescindible de trabajo. Gracias a simulaciones
electrónicas cada vez más poderosas como las imágenes virtuales, animaciones
tridimensionales y multimedia, entre otras, ahora somos capaces de simular
directa, flexible y económicamente los espacios interiores durante el proceso
de diseño. El medio digital nos ofrece representaciones en ‘escala real’ que no
tiene precedentes, por ejemplo los recorridos virtuales de viviendas como si
uno estuviese adentro. La capacidad de
representar el diseño de interiores en tiempo y en ‘escala real’ implica que el
medio digital es capaz de simular experiencias reales.
Lo que esta nueva era digital nos ofrece es la posibilidad de centrar nuestra preocupación en la experiencia y las sensaciones que comunican los espacios diseñados, por encima de la preocupación del diseño mismo.
La coexistencia de ambos métodos, es decir la representación
a mano alzada y la representación digital, perdurará largo tiempo, al menos
hasta que los software CAD incorporen herramientas y formas de visualización
capaces de permitir al profesional suplantar el lápiz por el mouse,
convirtiéndose así en un sistema único e ideal para el proyecto y desarrollo de
documentación de los Diseños Interiores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario